Meditaciones Compartidas

Otra vez estamos en los comienzos: De nuevo el sol vuelve a surgir del fondo de las aguas del océano primordial y se vuelve a levantar sobre el cielo y a prolongarse en su recorrido minuto a minuto hasta que gane la carrera del tiempo y el espacio allá por el lejano 21 de Junio. Otra vez celebrando los nacimientos, y de nuevo nos encontramos contemplando la semilla y esperando que ella se desenvuelva para poder admirar el futuro árbol donde volverá a nacer el fruto.

Otra vez lo divino de cada uno vuelve a encarnar en estas materias frágiles que poco a poco se van a ir desarrollando a lo largo del año. Otra vez a celebrar el mundo de los encuentros y de nuevo tendremos que abrazarlos si queremos vivir y ensanchar el alma con esos hallazgos tan maravillosos que el destino nos pone en el camino. Son estos mágicos encuentros los que nos traen esa oculta lección, con ese bendito regalo que solo podremos comprobar si tenemos paciencia y abrimos la sorpresa cuando nos lo pida el transcurrir del tiempo y no antes. Una vez más volveré a recorrer el sendero tantas veces trillado aunque sea siempre con experiencias diferentes y una vez más volvemos a observar para aprender de la nueva vida que hoy comienza....

Otra vez, y otra y otra… y otra vez estoy yo aquí con mi conciencia despierta dispuesto a asimilar cuanto pueda sobre mí mismo, sobre los demás y sobre nuestra relación en el tiempo y en el espacio, y así continuare, como viajero infatigable (que una y mil veces reemprende la misma peregrinación aunque por senderos diferentes), hasta que al fin pueda descubrir y palpar con estos sentidos interiores (que el Señor infinito que nada sobre el tiempo me dio cuando me desprendí de El), quien soy yo y para que vuelvo a esta tierra una y otra vez y cuando al fin podre romper los modos de este juego y realizaré mi postrer viaje de ensueños y pesadillas.

Sí, hemos entrado en Enero del 2010 año de nuestro Señor y otra vez el tiempo se ha puesto a correr como corren las olas del mar siempre yendo y viniendo sobre la misma playa, y siempre lavando la misma arena pero con distinta agua. Y esta vez, en mi afán por recorrer este ciclo con la conciencia bien despierta he preparado una galera mítica con sus tres palos y sus dos velas en cada palo, y con ella me dispongo e emprender la travesía que va desde el nacimiento hasta el enquillamiento y el desastre final a la hora de la muerte... Que en realidad eso es cada año: un nacer y un morir, un repetir en pequeño toda la historia de la vida entera aunque cada vez con aventuras y personajes diferentes, o al menos con diferentes atuendos.

Antes de comenzar este año, (como en realidad se hace antes de nacer, cuando el ser Espíritu del hombre vaga por esos mundos invisibles esperando le toque el turno para encarnar por medio de la pareja que elija), he buscado mi marinería que es una tripulación de 28 componentes; 7 por cada uno de los aspectos que constituyen el armazón de cada ser humano mientras que transcurre su vida por este mundo de los sentidos físicos. (Si, el 7 es todo un símbolo traído desde más allá de nuestro tiempo como clave de la expresión valida para este océano del tiempo en el que voy a navegar.) 7 elementos que compondrán el mundo mental, 7 el mundo de los fenómenos afectivos , y los otros catorce que serán 7 para la energía y la supervivencia y otros 7 para las tareas físicas. ( Así, recojo la tradición esotérica que habla de los 4 cuerpos que constituyen la personalidad o la parte instrumental que compone la parte visible de esto que llamamos hombre.)... Por encima de esto y al mando del timón, estoy yo, el ser conciencia que unifica todos estos elementos y les da sentido y les marca la Ruta; está el YO SOY, autentico ser del hombre, aquello que constituye el Camino, la Verdad y la Vida.

Así he preparado mi galera para atravesar este inmenso océano del espacio tiempo que conforma el año, pero esta vez he tenido la suerte de no ir solo, esta vez junto a mi nave, allá como una estrella lejana en el fondo del mar, brillan las velas azules de otra nave que me acompaña en esta aventura del Amor y del conocimiento. Cuando estrenamos su nave y rompimos la mítica botella de cava sobre su doble casco de maderas preciosas magníficamente pulidas, le dimos en llamar Granloki, (en honor de aquel viejo dios nórdico del humor y de la burla, que será nuestro acompañante en toda la travesía), pero tu querido lector puedes bautizarla como quieras, si de verdad deseas embarcarte con nosotros por estas aguas abismales del inquieto y enigmático océano del conocer.

Pero te advierto, estas aventuras a través del tiempo, requieren mucha pericia y más paciencia y sobre todo tacto y sentido común y aun por encima de ello, la entera confianza en el destino porque sabemos que todo cuanto nos ocurriese en esta travesía nos será otorgado por una dirección universal plena de sabiduría que vela por nosotros, y nos aúna con las aguas, los vientos y todo cuanto se mueve y se aquieta en este mar océano.

Todo ello es necesario para comprenderse aceptarse y seguir navegando y sorteando peligros y emociones. Captar esto, grabarlo en cada uno de los corazones de nuestros hombres ese será nuestro trabajo con la tripulación para que así podamos llegar al final del viaje y allí, en los arrecifes perdidos de la ultima isla cuando ya se pone el sol por detrás de las ultima aguas, encontraremos el cofre que nos ofrecerá el tesoro más valioso de cuantos podamos encontrar en la tierra y en el cielo que es: el Conócete a ti mismo" porque poseer esto es como poseer todo el universo.

Y con esto termino. Arroja de ti todo temor y navega mar adentro te garantizo que este tesoro ya lo encontraron algunos bucaneros de cuantos surcan estas aguas y sus planos y descripciones los llevamos con nosotros. !Se valiente y enfila tu timón hacia las estrellas que vamos hacia lo más alto de mar!